La cobardía.

Cosas que dirán:

“y me da igual, me da lo mismo,
que digan algo y lo piensen distinto,
si entro en el juego vamos más que listos.”

El pasado 29 de Septiembre, me enviaron dos comentarios de un anónimo poniéndome “vaya mierda pringao” (Los dos comentarios ponían eso). Y se habrá pensado que esas tres palabras me afectan... por favor, que no me haga reír xD.

Y digo yo... si no le gusta mi blog... ¿por qué entra? ¿Por qué lo lee? De todos modos, yo no le hago caso a esa persona, porque para empezar no ha dicho quién es, se ha puesto como anónimo. Odio las personas que no dan la cara, las considero como cobardes, la filosofía de ese género es tirar la piedra y esconder la mano. Dan asco ¿verdad? Y luego al llamarme “pringao”, te das cuenta de que es algo personal en contra de mí y no con el blog, por lo tanto no debe de ser un desconocido. Lo que ignora esa persona es que yo sospecho quién es y se lo dije a mi amiga Bea, y mi amiga me dice: “¿no se cansa esa tía?”. Po’ va a ser que no xD.

Además, ha escrito para nada la muy inútil... porque cuando me dejan un comentario, el servidor del blog me manda un e-mail notificándome quién es y qué es lo que ha puesto. Y si el comentario es insultante y/o ofensivo, los elimino para que no haya problemas. Así que, no intentéis buscar los dos comentarios que me dejó, porque no lo vais a encontrar.

Así que, sólo le pido a esa persona que no pierda más el tiempo dejando comentarios ofensivos, porque van a ser eliminados.